El opio es un producto natural obtenido por incisión de las cápsulas verdes de la adormidera. El látex lechoso que resulta de las incisiones se rasca con la mano y se seca al aire para producir la goma de opio. El opio en bruto es una compleja mezcla que contiene azúcares, proteínas, lípidos, otras sustancias gomosas y agua, de manera que la fracción alcaloide activa constituye sólo del 10% al 20% del peso total.
La literatura señala que se han encontrado aproximadamente 40 alcaloides, de los cuales cuatro o cinco de estos pueden considerarse como los elementos constituyentes principales, comprendidos en dos categorías generales, los alcaloides fenantrénicos, representados por la morfina, la codeína y la tebaína, y los alcaloides isoquinolínicos, representados por la papaverina y la narcotina (noscapina).
Las cantidades relativas de los diferentes alcaloides pueden variar considerablemente, según factores como el clima, la altitud, la fertilidad del suelo, la cantidad de humedad disponible, la edad de la planta, el momento de “sangrado” y la variedad de Papaver somniferum.
La morfina es el alcaloide principal del opio, y se encuentra en concentraciones que oscilan entre el 4% y el 21%, más comúnmente entre 8% y 14%. La narcotina es el segundo alcaloide más abundante, y suele estar presente de un 2% a 8%. La codeína se encuentra en el opio en bruto en concentraciones del 0,7% al 3%. Su presencia, como impureza en la morfina en bruto utilizada para la preparación de heroína, da por resultado la formación de acetilcodeína. Finalmente la tebaína es un alcaloide secundario presente en la Papaver somniferum en una concentración del 0,2% al 1%. La papaverina suele encontrarse en la concentración de 0,5% a 1,3%.
El opio en bruto en estado fresco, es una sustancia viscosa parecida al alquitrán, color marrón oscuro,a medida que madura pierde su consistencia y se hace frágil y duro. Tiene un olor característico parecido al regaliz que se intensifica cuando el producto se disuelve en agua.
Por su parte, el opio preparado, se obtiene aplicando varios métodos al opio en bruto, entre otros, la extracción, filtración y evaporación del agua. Este tratamiento se lleva a cabo para obtener un producto adecuado para fumar.
Finalmente el producto que queda en la pipa después que se fuma el opio se denomina residuo de opio. Debido a la combustión y volatilización incompleta, el producto tiene aún algunas características del opio, incluida la presencia de morfina en una cantidad importante.
La morfina en bruto obtenida en el mercado ilícito puede ser de calidad muy alta o muy baja, según diferentes aspectos como los procedimientos de purificación empleados, la finalidad que se persigue con el material entre otros.
Existen pruebas químicas para la identificación de estas sustancias, las pruebas presuntivas son ensayos rápidos que permiten presumir si se trata o no de algún tipo de sustancia sujeta a fiscalización de acuerdo al color que se presente.
En el caso de los derivados del opio la prueba de Marquis permite identificar la presencia o ausencia de éstos. Para llevarla a cabo se debe colocar una pequeña cantidad de la sustancia sospechosa en una placa de toques y se le añadirá una gota del reactivo 1 (de 8 a 10 gotas de solución de formaldehído al 37% en 10 mL de ácido acético glacial) y posteriormente tres gotas del segundo reactivo (ácido sulfúrico concentrado), la interpretación del ensayo como positivo para morfina, codeína o heroína, será cuando la prueba de como resultado un color violeta a morado rojizo.
Sin embargo, es necesario señalar que algunas otras sustancias pueden dar una reacción similar, por ello es necesario llevar a cabo una prueba confirmatoria para asegurarse de que efectivamente se trata de derivados del opio. Aunque estos ensayos son relativamente sencillos, no siempre se pueden llevar a cabo en el lugar de investigación, por ello hoy en día existen kits preparados para su uso inmediato sin necesidad de más reactivos, un ejemplo son los kits de análisis Nark II comercializados por ZOGBI, pensados para su uso inmediatos sin necesidad de algún tipo de preparación.